13. Reducción del ciclo de vida de las empresas

El ciclo de vida de las empresas se está acortando de forma significativa. Un claro ejemplo de esta tendencia es la disminución en la duración promedio de las compañías que integran el índice S&P 500. A finales de la década de 1970, su vida media era de 30 a 35 años; sin embargo, esta cifra se ha reducido considerablemente y se estima que caerá a entre 15 y 20 años en la presente década. Este fenómeno refleja no solo una creciente presión competitiva, sino también el acelerado ritmo de la disrupción tecnológica (Innosight, 2021).

En Chile, se observa una tendencia similar de acortamiento en el ciclo de vida empresarial. Un estudio reciente reveló que la duración promedio de una empresa en Chile en la actualidad es de solo 11,84 años, medida desde su inicio de actividades hasta el inicio de un proceso de quiebra (Diario Estrategia, 2023)

Esta nueva realidad obligará a las empresas a adoptar un enfoque más ágil, en el que la innovación constante, la rápida adaptación a nuevas tecnologías y la simplificación de las estructuras internas se conviertan en factores clave para la supervivencia. Las organizaciones que logren integrar estas capacidades estarán mejor preparadas para enfrentar un entorno caracterizado por la transformación continua y la creciente volatilidad del mercado. Por el contrario, aquellas que mantengan estructuras rígidas, con numerosos niveles administrativos, tiempos de respuesta lentos y escasa adopción tecnológica, enfrentarán mayores riesgos de desaparición (Marinelli, 2015).