Escenarios y desafíos de los futuros del trabajo

E. Desafíos identificados

A continuación, presentamos diez desafíos que son resultado de un enfoque que combina dos perspectivas complementarias. Por una parte, derivan del marco teórico propuesto, que destaca la necesidad de desarrollar organizaciones adaptativas capaces de responder a entornos complejos e inciertos. En segundo lugar, integramos las ideas, inquietudes y experiencias recogidas durante las mesas de trabajo con líderes del Consejo Futuro del Trabajo, quienes identificaron los temas que consideran más relevantes frente a los posibles escenarios futuros, muchos de ellos, ya visibles como cambios importantes en su realidad cotidiana. De forma notable, ambas miradas -la conceptual y la experiencial- coincidieron en una serie de aspectos clave, lo que refuerza la relevancia y la urgencia de los desafíos que se abordan a continuación.

Es importante aclarar que algunos temas que aparecieron en las mesas de trabajo no se incluyen como desafíos centrales debido a que, aunque importantes, no se consideraron como parte del foco central de este reporte. Un ejemplo de esto, fue la necesidad identificada de capacitación en inteligencia artificial (IA). Los líderes destacaron la urgencia de formar a sus colaboradores en esta área, reconociendo que el dominio de herramientas de IA se ha convertido en una habilidad clave en el mundo laboral. Esta preocupación se alinea con el estudio Work Trends de Microsoft (Microsoft, 2024), que indica que el 66% de los líderes no contrataría a alguien sin habilidades en IA, mientras que el 77% cree que esta tecnología permitirá que empleados con menor experiencia asuman mayores responsabilidades. Si bien esta formación es crucial y resulta clave en términos tácticos, este informe se centra en aspectos estratégicos para la adaptabilidad organizacional, por lo que se ha decidido no abordar este tema en profundidad. 

Los diez desafíos que se presentan a continuación abordan aspectos clave para que las organizaciones fortalezcan su capacidad de adaptación. Estos desafíos no son acciones a considerar en el futuro, sino medidas que las empresas deberían comenzar a implementar de forma inmediata para mejorar sus posibilidades de mantenerse vigentes a largo plazo, en entornos cada vez más inciertos y complejos.